En la actualidad, una organización flexible es aquella que pretende, a corto plazo, utilizar los factores disponibles para adaptarse a los cambios inmediatos. Del mismo modo, para ser capaz de afrontar estos cambios, la estrategia de la organización debe adaptarse a un mundo empresarial basado en 4 características (VUCA): incertidumbre, volatilidad, complejidad y ambigüedad.
En definitiva, hoy en día es necesario que las organizaciones se involucren lo máximo posible para subsistir en un mundo empresarial más VUCA que nunca, y así adaptarse y reaccionar de forma casi inmediata a los cambios que vayan surgiendo tanto en el sector como en la sociedad.
¿Cómo es el contexto actual?
En este entorno de transformación continua, tanto económica como social, donde la inmediatez y la complejidad crecientes nos retan a liderar de manera innovadora y efectiva, se ha de ser consciente de como tomar las mejores decisiones para la organización. Para ello hay que tener claro las características del mercado actual:
1- Cambios discontinuos en la sociedad y en el sector
2- Ciclos de vida cortos
3- Presión en precios
4- Clientes cada vez más informados y con mayor posibilidad de decidirse por otras opciones
¿Cómo organizarse en el Método iFlow?
El mundo VUCA nos sitúa en un entorno de crisis permanente. Es por ello que las organizaciones tienen la necesidad de estructurarse y diseñar un sistema organizativo de innovación que permita afrontar los cambios futuros. En este caso las bases a seguir en el Método iFlow son las siguientes:
1- La innovación en el centro de todo
2- Liderazgo para el aprendizaje continuo, no la eficiencia a corto
3- Colaboración en lugar en de la competición
4- Enamorar a los profesionales de la organización
Si las organizaciones son capaces de transformarse y hacerse flexible, con capacidad de adaptarse a los cambios rápidamente, implicando a los profesionales y trabajadores en el desarrollo de nuevos productos, podrán gestionar las crisis y hacerles frente.
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