La Formación y la capacitación de los Recursos Humanos pueden proporcionar una ventaja competitiva de las empresas, en la medida en que este proceso se desarrolle ajustándose con precisión a las necesidades e intereses de la organización.
La principal ventaja que facilita seleccionar una buena formación es la no dependencia del mercado laboral. La inversión en formación desemboca en innumerables beneficios a largo plazo. El desarrollo de los RRHH hace posible que los nuevos puestos que aparecen en el plan de recursos humanos se cubran a nivel interno a través de estas formaciones, con lo que se consigue una menor dependencia del mercado de trabajo y además los trabajadores que van cubriendo esos puestos poseen la gran ventaja de conocer la organización, su cultura, sus políticas, sus normas, sus compañeros etc. La formación mirada como una política sostenida en el tiempo, permite hacer frente a la obsolescencia profesional, a la falta de competitividad y a los cambios sociales y tecnológicos.
Por lo tanto, el propósito principal de la formación de los empleados de una organización es fomentar sus capacidades personales y profesionales, a la vez que se adaptan sus actitudes en beneficio de estos y de la propia empresa. También se basa en incrementar la empleabilidad y productividad de los trabajadores, cuyo objetivo final es el alcance de las metas de la empresa, por lo que se considera un proceso cíclico de mejora continua que se moldea en función de los proyectos futuros.
La formación tiene un coste que, en ocasiones, es muy alto, por ello los recursos deben centrarse donde son más necesarios para la empresa. Han de evaluarse las necesidades tanto en cuanto a las personas que hay que formar, como en lo relativo a las materias en las que hay que formarlas para posteriormente hacer un plan de formación acorde a las necesidades y recursos de la empresa. Por último se evalúa al trabajador. Hay muchos métodos para realizar esta evaluación pero no se podrá valorar realmente y con buen juicio al empleado hasta que este empiece a plasmar en hechos lo que ha aprendido. El proceso de seguimiento puede durar semanas o meses.
En la actualidad, las empresas están apostando más fuerte que nunca por la formación online en detrimento de los formadores clásicos. Los trabajadores inscritos en la formación online reciben cursos y material en sus ordenadores. Esta tendencia tiene una serie de ventajas como son:
Ahora bien, hay que considerar el proceso de aprendizaje como tal y cuidar de que el trabajador no se limite solo a leerse el material y los casos aportados. El aprendizaje a través de esta vía, se ha de tomar como algo entretenido y divertido, a la vez que dinámico. Si no lo es, captar la atención del trabajador se convierte en una tarea difícil. Es por ello que la empresa, a través de su departamento de RRHH, debe elegir la mejor formación posible, dotando de conocimientos y dinamismo a los cursos que van a recibir los trabajadores.
En IDavinci elegimos la mejor formación para nuestros profesionales, de esta manera no solo evaluamos al mejor candidato para tu empresa, si no que le damos las pautas para que desarrolle su trabajo con más idoneidad. Si quieres saber más puedes contactarnos a través de esta misma web o enviarnos un correo a infodavinci.es.