La innovación en el campo de la medicina sigue progresando y trayendo novedades que parecen dignas de una película de ciencia ficción. En este caso hablamos de una innovación médica que podría augurar la implantación de robots de tamaño microscópico en el cuerpo humano.
Con ayuda de estos robots microscópicos los servicios sanitarios tendrán la posibilidad de acceder a regiones internas especificas del cuerpo humano sin requerir la aplicación de procedimientos invasivos. Algo generaría grandes ventajas, ya que requeriría de menos esfuerzo del cuerpo humano para soportar ciertos tratamientos o intervenciones.
¿Qué objetivos se esperan cumplir?
Estos pequeños robots son capaces de llevar a cabo misiones de búsqueda y destrucción programada. Pero no solo se quedan en eso, pueden realizar casi cada tarea para la que sean programados como por ejemplo: localizar tumores, liberar medicamentos en lugares concretos y en la dosis correcta. Además, tienen la capacidad de vincularse entre sí para crear un puente donde el tejido pueda crecer.
Su eliminación y apagado es algo muy sencillo, con sólo pulsar un botón tenemos su desactivación totalmente inocua para el cuerpo.
¿Cómo se producen los nanorobots?
En primer lugar, se produce una secuencia de ADN según las necesidades y luego se replica. Este ADN incluye un código que se activa cuando entra en contacto con materiales particulares en el cuerpo. Las moléculas también pueden recibir señales entre sí, esto es muy importante ya que dan muchísimas posibilidades a los servicios sanitarios.
Los nanorobots pueden cambiar su forma en respuesta a las señales del cuerpo y enlazarse entre sí. Cuando llegan a la zona afectada, pueden unirse y convertirse en un puente sobre la herida. De este modo acelerar los factores de crecimiento para estimular la curación. Además, una de las opciones es enviar estos robots a través del cuerpo a tratar tejidos con características particulares, tales como tumores.
La aplicación de los nanorobots aún está en una fase muy temprana, la falta de regulación y de estándares de control de calidad, eficiencia y seguridad por parte de las administraciones estatales hacen que las trabas sean aun grandes escollos que superar. Los nanorobots son el futuro de los tratamientos y de los sistemas de sanidad de los diferentes países, revolucionará la forma de intervenir y acortará los tiempos de recuperación. Es una innovación que llega para mejorar la vida de los pacientes y de los especialistas sanitarios.