El Gobierno va a poner medidas para resolver un problema que lleva años dificultando el progreso, la morosidad. En la actualidad, especialmente tras la pandemia producida por el Covid-19, algunas organizaciones no cumplen con los pagos establecidos, aunque es una situación que no necesita de crisis para producirse.
Por lo tanto, para atajar este problema, el Gobierno, a través del consejo de ministros, ha decidido que las organizaciones morosas no podrán ser beneficiarias de subvenciones públicas. Con esta norma se busca penalizar a las empresas que incumplen pagos, no solo con la administración pública si no también con la factura eléctrica, entre otros.
Financiación más sencilla
Además, esta norma impulsada por el gobierno también impulsa los instrumentos de financiación alternativos a la financiación bancaria como el ‘crowdfunding’ o la recaudación de fondos ‘on line’. Toda esta nueva norma se enmarca en la normativa europea, dando más flexibilidad a estas plataformas para prestar sus servicios, reforzar la protección de los inversores y permitir la creación de vehículos para agruparlos.